Celebrar la salud sexual es celebrar la vida.
Cada año, septiembre nos recuerda que la salud sexual no es un lujo ni un tema “aparte”, sino una parte fundamental de nuestra vida y bienestar.
La World Association for Sexual Health celebra cada 4 de septiembre el Día Mundial de la Salud Sexual y el foco está en las relaciones positivas.
Porque la salud sexual no se trata sólo de prevención de infecciones o métodos anticonceptivos. También se trata de cómo nos vinculamos: con nuestras parejas, con nuestras amistades, con la familia, con el cuerpo médico y, sobre todo, con nosotros mismos. Aprender a comunicarnos, a poner límites, a escuchar y a expresar lo que deseamos es tan importante como cualquier chequeo médico.
Relaciones que construyen bienestar
La campaña de este año nos invita a mirar los vínculos como un jardín: necesitan tiempo, atención y cuidado para florecer. Ya sea en una relación romántica, con tu grupo de amigos, con un colega o incluso contigo mismo, lo que define una relación positiva es el respeto y la claridad.
En la intimidad sexual, esto significa hablar abiertamente sobre lo que nos gusta, lo que no, sobre nuestros deseos, expectativas y también sobre nuestra salud. Tener estos diálogos no siempre es fácil, pero son los que marcan la diferencia en la calidad de vida.
Cuando la salud íntima necesita apoyo
En este contexto, también es importante hablar de lo que sucede cuando la vida sexual se ve afectada por problemas médicos, como la disfunción eréctil. Se trata de una condición mucho más común de lo que se cree, y que puede tener un gran impacto tanto físico como emocional.
La buena noticia es que existen soluciones seguras y confiables que permiten recuperar una intimidad plena y satisfactoria.
Una de ellas es la prótesis de pene inflable AMS 700™ de Boston Scientific, diseñada para imitar la erección natural, con resultados clínicos probados durante más de 50 años. Este tipo de implante ha ayudado a miles de hombres a volver a disfrutar de su vida sexual con confianza, reduciendo las preocupaciones más frecuentes como la rigidez, el aspecto natural y la durabilidad.
Cuidarnos también es hablar sin tabúes
El Mes de la Salud Sexual es una oportunidad para dejar de lado silencios innecesarios y hablar con franqueza. Consultar a los profesionales, compartir dudas con nuestras parejas, y sobre todo, reconocer que la salud sexual es parte integral de nuestra salud general.
Este septiembre, la invitación es clara: hablemos de sexualidad con naturalidad, cultivemos relaciones positivas y recordemos que el cuidado también significa buscar ayuda cuando la necesitamos.