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En el Mes Nacional de la Prevención del Cáncer, toma acción y reduce los riesgos.

Cada año, millones de casos de cáncer podrían evitarse con pequeños cambios en nuestro estilo de vida. Desde protegerte del sol hasta mantener un peso saludable, este mes es una oportunidad para aprender, prevenir y actuar. Descubre cómo cuidar de ti y de los que amas.

 

Cada elección cuenta: juntos contra el cáncer

Febrero es el Mes Nacional de la Prevención del Cáncer, una campaña que nos recuerda que hasta el 40% de los casos diagnosticados y casi la mitad de las muertes por cáncer en los Estados Unidos están relacionados con causas prevenibles. Factores como el tabaquismo, el exceso de peso, la inactividad física y la exposición excesiva al sol juegan un papel clave en el desarrollo de esta enfermedad.

 

La buena noticia es que hay acciones simples y efectivas que puedes tomar para reducir significativamente tu riesgo. Pequeños cambios hoy pueden marcar una gran diferencia en tu futuro.

 

Factores de riesgo del cáncer

Es esencial conocer los factores de riesgo que podrían aumentar la probabilidad de desarrollar cáncer. Algunos son evitables, mientras que otros, como la edad o los antecedentes familiares, no lo son. Estos son los más comunes:

  • Edad avanzada.

  • Historial personal o familiar de cáncer.

  • Uso de tabaco.

  • Obesidad y consumo excesivo de alcohol.

  • Exposición a sustancias químicas o radiación, como los rayos UV.

  • Infecciones virales específicas, como el VPH o la hepatitis B.

 

Conocer estos factores puede ayudarte a tomar decisiones más conscientes y a discutir con tu médico opciones como pruebas genéticas o asesoramiento especializado.

 

6 consejos para reducir el riesgo de cáncer

Si bien no existe una fórmula mágica para prevenir el cáncer, hay pasos que puedes dar para minimizar los riesgos:

 

Mantén un peso saludable y un estilo de vida activo. Sigue una dieta basada en vegetales, limitando las carnes procesadas, alimentos ultracalóricos y el consumo de alcohol.

 

Incorpora al menos 30 minutos de actividad física al día. Para resultados óptimos, realiza 150 minutos de ejercicio moderado o 75 minutos de actividad intensa por semana.

 

Protege tu piel del sol. Evita exponerte entre las 10:00 a.m. y las 4:00 p.m. Usa protector solar, ropa que cubra la piel y busca sombra siempre que sea posible. Di no a las camas de bronceado y lámparas solares.

 

Vacúnate contra ciertos virus. El VPH (virus del papiloma humano) está vinculado a varios tipos de cáncer como el cervical, de garganta y genital. Vacunarte puede reducir el riesgo significativamente. La vacuna contra la hepatitis B protege contra el cáncer de hígado.

 

Evita el tabaco y sus derivados. El tabaco daña el ADN y causa diversos tipos de cáncer. Esto incluye cigarrillos, cigarros, tabaco masticable, pipas de agua y hasta el humo de segunda mano.

 

Realízate chequeos médicos regulares. Las pruebas de detección temprana son clave para detectar el cáncer a tiempo y aumentar las posibilidades de tratamiento exitoso. Consulta las guías de la American Cancer Society para saber qué exámenes necesitas según tu edad.

 

Conoce tu historia familiar. Entre el 5 y el 10% de los cánceres son hereditarios. Entender tu historial familiar puede guiar a tu médico para determinar cuándo debes comenzar con los chequeos o si necesitas asesoramiento genético.

 

 

El Mes de la Prevención del Cáncer no solo busca concienciar, sino también empoderarnos para tomar medidas concretas que cuiden nuestra salud. Cambios pequeños y constantes, como dejar de fumar, comer mejor o movernos más, pueden marcar una gran diferencia.